PNA Conclusiones

(only in Spanish)

CONCLUSIONES SIMPOSIO 

parc natural de l’albufera ara (simposio)

La celebración de un simposio, en noviembre de 2016, con ocasión del 30 aniversario de la declaración como Parque Natural de l’Albufera de Valencia, fue una ocasión única para la participación espontánea de la sociedad civil de forma abierta e integradora, a al vez que decidida, en afrontar los graves problemas que todavía sufre nuestro lago más emblemático.

La participación directa en las sesiones por parte de expertos, los debates generados con amplia intervención de gente interesada y la participación a distancia mediante redes sociales, permitió a un comité científico-técnico extraer y sintetizar un diagnóstico no exento de propuestas claras, recogiendo y analizando todos los posicionamientos para generar un documento que nos atrevemos a calificar de piedra angular en la gestión del parque si se quiere oír a la sociedad.

(se incluye en esta web el contenido del informe de conclusiones del simposio por la carencia por parte de otras instituciones en publicar este documento)

INFORME DEL COMITÉ CIENTÍFICO-TÉCNICO

PREÁMBULO

Que el Parque Natural de l’Albufera de Valencia, es un sistema de una enorme complejidad, no es una conclusión, es una evidencia tan obvia que no es necesario casi ni justificar. Y se constata en la dificultad de su morfología e hidrología, en el conflicto permanente entre usos y anhelos, en el particular entramado institucional con sus singularidades y competencias cruzadas, así como en la visión de la ciudadanía y la dificultad de alcanzar su estado ideal.

No siempre ha sido así, ya que durante sus 3 siglos como ecosistema muy antropizado, no ha recibido la atención que ahora despierta ni los retos a que se enfrenta. Más al contrario ha sufrido tener que desempeñar un papel utilitarista y a veces incluso de elemento molesto a un desarrollo concebido en otras épocas de forma diferente. Cosas de la historia.

Pero tras 30 años de ser reconocido como Parque Natural es hora de hacer balance. Una generación nueva y otra a quien hay que legarla nos estimulan a reflexionar y replantear cómo garantizar ese legado en condiciones.

La Universidad de Valencia ha tomado la iniciativa de organizar el Simposio “Albufera ara”, con ocasión de la celebración de ese 30 aniversario. No ha sido un simposio al uso, tampoco oficial, sino un foro abierto para quién ha querido expresarse en él. No ha pretendido ser el único modo de hacerlo, simplemente uno más. Tampoco ha tenido la pretensión de corregir, suplantar o examinar a quien tiene las competencias específicas en cada materia, pero sí ofrecerle la opinión de una parte de la ciudadanía, creemos que la más interesada y/o preocupada.

Los temas abordados, biodiversidad, usos públicos, agua, agricultura y ordenación del territorio, cubren, si no todo, un gran espectro de asuntos de debate y opinión.

Tampoco mirar al pasado, sino para un correcto diagnóstico y comprensión, ha ido el objeto sino por el contrario mirar al tanto a un futuro inmediato como ese más allá que será el presente de nuevas generaciones.

Proceso de elaboración

Uno de los éxitos de este simposio es la ingente cantidad de ideas, preguntas, comentarios, preocupaciones y también propuestas, puestos sobre el tapete. Ello corrobora el axioma de la gran complejidad del sistema, tal y como exponíamos en el arranque de este documento.

Premisa irrenunciable para esta labor, es la de no excluir a priori ninguna posición, y analizar todas y cada una de las intervenciones, tanto las expositivas por los ponentes como las provocadas en los debates de cada una de as sesiones.

De este proceso se ha obtenido un total de 290 ideas o proposiciones, de tres fuentes:

  • Las propias presentaciones de los Ponentes, incluida la del moderador como resumen
  • Las intervenciones durante los debates, tanto de la sala a mano alzada como por escrito así como a través del hashtag #Albuferaara en las redes sociales
  • Una primera lista de temas relevantes propuesta por los miembros del comité científico-técnico.

Las 290 proposiciones han sido sintetizadas en 107, tratando de no censurar las ideas, sin perder alcance, pero evitando repeticiones o ambigüedades en lo posible. Este primer conjunto de ideas ha sido sometido al análisis del comité científico-técnico a los efectos de pronunciarse sobre su grado de aceptación y su relevancia, a fin de identificar aquéllos asuntos que con mayor claridad podrían ser conclusiones claras del simposio y el grado de relevancia de estas para su inclusión en un documento centrado en lo más importante.

Es por ello que, mediante la intervención de los miembros del comité de forma anónima, se ha podido llevar a cabo una criba por relevancia y una valoración-validación o valoración-rechazo de las proposiciones.

Viendo el grado de acuerdo entre los miembros del comité y la relevancia, se han seleccionados los objetivos y prioridades más claramente identificados, los diagnósticos más claros puestos a la luz y las propuestas más relevantes a poner a disposición de los diferentes agentes que actúan sobre el Parque Natural. Igualmente se ha podido identificar las tesis más controvertidas o las que gozan de más consenso.

Para este proceso se ha seguido, en lo posible, una variante simplificada de la metodología DELPHI. Se trata de una técnica para obtener información esencialmente cualitativa, pero relativamente precisa, de carácter sistemático e interactivo a partir del trabajo un panel de expertos.

De este proceso salen las principales conclusiones a este Simposio, no como un ejercicio académico de ciertos expertos sino más como reflejo de lo expuesto y debatido, con la conciencia de la limitación que tiene, la propia dimensión del grupo de trabajo, como la audiencia activa que ha compartido sus comentarios y preguntas, que, repetimos, no se arroga representatividad alguna sino entusiasmo y ganas de ser oídos por los que han de decidir.

El documento esperamos que sea un inicio para su evolución, un texto vivo donde pueda ir enriqueciéndose conforme se arbitren mecanismos para ello. Nada sería más gratificante que ver crecer este primer documento y contribuir de forma continua a la labor de las instituciones responsables.

 

OBJETIVOS Y PRIORIDADES

Es indiscutible que La variedad de ambientes alberga una biodiversidad reconocida internacionalmente tanto por su riqueza y densidad como por su singularidad, con numerosas especies endémicas y prioritarias y Como se ha dicho, El PNA constituye un sistema extraordinariamente complejo en lo físico, medioambiental, institucional, legal, …  de ahí también lo complejo del análisis.

Los compromisos relacionados con las declaraciones de Parque Natural, Humedad RAMSAR y Red Natura2000 han de ser considerados como premisas para la definición de los espacios de actuación en todas las materias. Esta premisa, que es apoyada de forma unánime, también es proyectada sobre sectores específicos en los que se reclama que “La adaptación de las infraestructuras de transporte e hidráulicas merecen una priorización dentro de sus respectivos planes para acelerar la regeneración de las condiciones deseables del PNA”.

En cualquier caso se ha puntualizado que es importante respetar el régimen competencial a la vez que la jerarquía entre planes sectoriales e instrumentos reguladores.

Cuando nos referimos al agua, ese apoyo disminuye, reflejando la dificultad de acuerdo en esta materia. La tesis de la Prevalencia necesidades PNA sobre otros usos del agua ofrece un menor apoyo, aun así claro, pero ya con algunas posiciones más enfrentadas.

En estos treinta años de parque natural, hubo un ecuador cuando se produjo un viraje a la hora de tener en cuenta esta prioridad. La paralización de las obras de encauzamiento de la Rambla del Poyo, o Barranco de Massanassa dentro del PN puede ser un ejemplo de ello. En ese momento, el estado trófico del lago era pésimo y la atención real a la recuperación del estado de PN podría calificarse como no acorde con las premisas antes establecidas.

Fue en 2002, cuando se abordaron estas cuestiones y el análisis de su estado de forma más decidida, dando voz a un panel multidisciplinar de expertos. Entonces se alcanzó un acuerdo de adoptar como objetivo de futuro la creación de las condiciones para la recuperación de una calidad ecológica en el lago equivalente a la que gozaba en los años 60s. Se puede concluir que este objetivo sigue vigente hoy en día.

Desde un punto de vista más técnico, ello estaría ligado al grado de eutrofización. Las condiciones de partida son muy lejanas y aunque el objetivo de calidad del lago ha de ser el de un lago oligotrófico, se está lejos de ello, incluso en el medio plazo. Será, seguro, un proceso más lento del deseado.

Es importante respetar el régimen competencial a la vez que la jerarquía entre planes sectoriales e instrumentos reguladores. Dentro del complejo entramado competencial e institucional, destaca, la singularidad de un lago de propiedad municipal, con regulación artificial del que se ocupa La Junta de Desagüe. Se ha calificado de anacrónica y necesitada de revisar su papel.

DIAGNÓSTICOS

Se constata una pérdida de biodiversidad en la Marjal, en especial la fauna relacionada con el sistema acuático. No solo el lago sino los ullals y las acequias forman una parte importante del ecosistema acuático. La conectividad con los ecosistemas fluviales del Turia y Júcar, condiciona igualmente la biodiversidad, en macro-invertebrados y microorganismos.

La viabilidad del ecosistema del parque depende de la cantidad y calidad de los recursos hídricos realmente asignados, de ahí la relevancia que el factor agua tiene en el sistema, siendo uno de los aspectos donde más difícil es de armonizar los diversos intereses, como se constatará.

El PORN vigente prevé la recuperación de un anillo alrededor del lago donde se recree el ecosistema intermedio entre arrozal y lago. Los filtros verdes o humedales artificiales mejoran la calidad de las aguas y contribuyen a la recuperación de un ecosistema intermedio y de la biodiversidad.

PROPOSICIONES

Desde la Cumbre de Rio, se ha ido legitimando más y más, para la mejor garantía de sostenibilidad, el compromiso social y la participación ciudadana en las decisiones relacionadas con el medioambiente.

Se ha puesto de manifiesto que deben darse pasos decididos para mejorar el acceso de la ciudadanía a la información medioambiental, hídrica incluida, por TODAS las administraciones, en el ámbito de sus respectivas competencias.

Todavía hay que avanzar más en la transición entre el trámite de audiencia y la participación como herramienta de garantía de la sostenibilidad y viabilidad de las soluciones

Una propuesta sobre la mesa es la posible creación de un Observatorio del PNA con toda la información necesaria legalmente, con acuerdo con Administraciones implicadas.

Es necesaria igualmente la adopción de un sistema de evaluación y seguimiento del estado ecológico y de conservación de estos ecosistemas acuáticos para el cumplimiento de las Directivas Hábitats y Marco del Agua.

Se necesita adaptar usos a objetivos de protección, rebajando la presión sobre el PN. Hay carencia de instrumentos de gestión del uso público (PUP) suficientes y de herramientas técnicas de puesta en valor (capacidad de carga, patrón de la visita, programa de interpretación, etc.).

Igualmente se recomienda fomentar la dimensión social de la conservación del PNA. La experiencia contrastada del Servicio municipal Devesa- Albufera, en la puesta en marcha de actividades dirigidas a estos nuevos usos públicos, manifiesta la necesidad de establecer un Plan de usos futuros, evidentemente compatibles con el compromiso de conservación adquirido tras su declaración como parque natural el 23 de junio de 1986.

Es necesario un compromiso de dotación de recursos materiales, humanos y económicos para asegurar un nivel de gasto acorde con la importancia del PN en mantenimiento, vigilancia, investigación, formación y divulgación.

El voluntariado y la implicación de ONGs se ha constatado como vehículos útiles para la conservación y hay que potenciarlos.

Donde se ha encontrado e mayor desencuentro de posturas en los relativo a los usos en la propuesta de promoción del uso turístico. Ante la tesis de que “ya existe demanda turística en el PNA. No es necesario ni deseable impulsarla, pero sí regularla y acondicionar el PNA para albergarla” la respuesta no ha sido tan clara.

 

EL CONFLICTO DEL AGUA

Se ha constatado de forma indiscutible que el estado actual del agua en el PN es muy deficiente y que compromete su estado ecológico. Contra eso hay que luchar y es demasiado obvio para su más extenso análisis. También es evidente que una sobredotación de caudal no es eficaz si no se contiene y detiene la entrada de polución, predominantemente en forma de nutrientes.

Las infraestructuras de saneamiento realizadas en los últimos 30 años han reducido de forma muy importante la entrada de contaminantes al lago, aunque los resultados quedan lejos de los deseables.

Algunas de estas cuestiones han sido debatidas, siendo como principales aspiraciones la imposición de condiciones estrictas de calidad de entrada de fósforo y otros contaminantes, con atención especial a los emergentes.

Que las aguas regeneradas de EDAR no tienen la calidad suficiente para ser empleadas, al menos de forma directa, como recurso hídrico en l’Albufera, puede concluirse como una de las conclusiones.

Por ello es urgente la puesta en marcha de las infraestructuras de depuración, reutilización y saneamiento ejecutadas.

Entre ellas urge la puesta en marcha de los tanques de tormenta ejecutados para preservar el lago de las primeras aguas pluviales que son las que más polución aportan. Igualmente, se considera urgente la terminación del nuevo Colector Oeste previo un acuerdo entre partes para su viabilidad.

Se requiere además que una parte significativa de las entradas al PNA sean aguas de máxima calidad.

L’Albufera forma parte del sistema Júcar y Turia por lo que hay que reconsiderar su situación en base a la Directiva Marco del Agua. Desde el punto de vista geomorfológico e hidrológico se justifica también al compartir sus deltas y las aportaciones históricas que la crearon.

En la diatriba entre demanda o restricción, como atributos para los caudales necesarios para el ecosistema PNA queda claro que son una restricción previa medioambiental al sistema de satisfacción inexcusable.

Hay un plan de Cuenca aprobado. Los objetivos de alcanzar el buen estado ecológico se aplazan a 2027. Hay que trabajar desde ya en la próxima revisión para 2021.

Es igualmente necesario y urgente un plan de gestión hídrica específico de PNA debidamente consensuado e incluirlo como parte del PRUG.

Por otra parte se considera imprescindible el impulso del Plan Especial de l’Albufera (CHJ) como parte del Plan de Cuenca, donde se contemple el régimen de niveles compatible con las necesidades ambientales y usos agrícolas sostenibles, con amplio consenso y participación.

Otra fuente de recursos reclamada es el caudal del Turia mediante la revisión de las concesiones de los riegos de l’Horta puede liberar caudales del Turia para el PNA en lugar de las aguas depuradas.

La sustitución de concesiones de agua de río por aguas regeneradas liberaría caudales de los ríos para garantizar caudales ecológicos en l’Albufera. Hay que trabajar en la implementación de un plan de reutilización al respecto valorando la contribución de los regantes en el objetivo a la hora de imputar costes.

Como ejemplo, la puesta en servicio de la infraestructura de reutilización de Pinedo puede aportar 19 Hm3 al año a la zona regable de la ARJ antes de que se consigan nuevos ahorros. Su implementación inmediata ha de considerarse para liberar caudales del Júcar para el PNA con una correcta imputación costes y servicios ambientales.

FALTA DE CONSENSO

Es en este capítulo sobre agua donde se encuentran las posturas más encontradas y las mayores faltas de consenso. Con independencia de las anteriores conclusiones, cuyo grado de acuerdo es amplio, se han encontrado otras en las que se detectan posturas distantes:

Las peticiones cuantitativas como de “Agua de calidad y cantidad suficiente > 250 hm3/año” o el rechazo a la dotación de caudales en base a ahorros futuros de modernización de regadíos o la garantía de existencia de los recursos necesarios para atender las necesidades reconocidas en el Plan de cuenca.

Tampoco en la posibilidad de uso de aguas subterráneas como medidas de emergencia se aprecia una coincidencia de posturas.

Tampoco la procedencia de revisión urgente (anticipada) del Plan de Cuenca independiente del Plan Especial Albufera en desarrollo. Sin embargo se reclama la consideración del propuesto plan hídrico de l’Albufera para su inclusión en el nuevo plan de 2021 y la adopción de medidas de gestión garantistas en el periodo.

 

 

AGRICULTURA

Los arrozales poseen una gran biodiversidad ligada a su paralelismo con el sistema natural siendo la inundación invernal fundamental para el mantenimiento de su función medioambiental.

Hay que compensar a los agricultores por los servicios ambientales que prestan, una vez validados dentro de un marco claro.

Igualmente se ha identificado como necesario evaluar el impacto ambiental de la modernización de regadíos y el efecto sobre el balance hídrico.

Se echa en falta y por ello debería desarrollarse una normativa específica de prácticas agrícolas permitidas, viables, compatibles con el régimen hídrico y restricciones ambientales. (Eliminación paja, fertilizantes, pesticidas, ..) y un vínculo con las ayudas basado en los servicios ambientales probados.

EL PUERTO Y LA COSTA

Se ha identificado como un conflicto pendiente la afección del Puerto de Valencia al PNA. Se debe afrontar de forma seria, pausada pero la posible afección del Puerto al PN y desarrollar un plan de mitigación de impactos.

La erosión potencial de la restinga es preocupante para el futuro de la Dehesa, por lo que se demanda abordar el estudio de riesgos y soluciones de futuro, por la afección, entre otros factores, del Puerto de Valencia.

Es prioritaria una estrategia de adaptación del PNA al cambio climático, y no solo por el efecto de niveles del mar, sino regímenes hídricos, temperaturas, etc..

TRANSPORTE TERRESTRE

En la CV500 se da una mortalidad de fauna incompatible con un PN y anula la conexión biológica Dehesa-Lago.

Parece irrenunciable una reconcepción del rol de la CV500 como vía de uso interior del parque, garantizando acceso adecuado a las poblaciones del mismo, y eliminando su papel de tránsito entre zonas exteriores al parque.

Se pone sobre la mesa la posibilidad de pacificación de la circulación vehículos CV500, con restricción de vehículos motorizados con excepciones a los vecinos y potenciando tanto el transporte público como el uso de la bicicleta.

Al mismo tiempo se reclama el consenso vecinal respecto al futuro de la CV500 compatible con el acceso al port de El Saler, tanto para la población local como visitantes.

URBANISMO

Los valores etnológicos del PN recomiendan restaurar los elementos esenciales de la percepción paisajística.

Un gran reto es afrontar en un plan a largo plazo, bien consensuado, cómo resolver las irregularidades urbanísticas que padece el PNA respetando la prevalencia jurídica de los títulos que posee el PNA y las prioridades que conlleva.

Se reclama garantizar que todo el suelo no clasificado como urbano sea suelo protegido no urbanizable y la protección urbanística de lo existente con ayudas de rehabilitación adecuadas a la población local.

Es necesario regularizar la titularidad de suelo de propiedad pública y de dominio público

Es urgente la redacción de un Plan de Acción Territorial para el PNA y su entorno próximo que, basado en un proceso de participación ciudadana integradora, respetando un nuevo PORN como condicionante proteccionista.

Coordinación de planes sectoriales de diferentes administraciones y supeditarlos a la O.T. específica del PNA

Es necesaria una revisión general de toda la normativa del PNA. PORN, PRUG, distribución competencial s/ley,.. , eliminación anacronismos.

PROPUESTA FINAL

No obstante todo lo anterior, la propuesta con más soporte y que queremos dejar como colofón por su transcendencia es que “sería deseable un gran pacto por La Albufera que garantizara la coordinación entre administraciones en un objetivo común, donde prime el diálogo y la negociación”.

A MODO DE EPÍLOGO

No todos estaréis de acuerdo con todo lo dicho aquí, no podría ser de otra manera, pero desde el respeto con que hemos querido tratar cada una de las ideas vertidas, esperamos la comprensión del lector respecto a los errores, lagunas o confusiones que la premura del tiempo nuestras propias limitaciones humanas, en nos hayan conducido a incurrir.

Aún así confiamos en la utilidad de este Simposio, instrumento espontáneo, del cual no hemos querido ser más que los transcriptores e intérpretes de la voz de los participantes, verdaderos artífices de su éxito.

Valencia, 13 diciembre de 2016

EL COMITÉ CIENTÍFICO-TÉCNICO

 

 

El comité científico-técnico estuvo compuesto por:

Presidente:

  • Enrique Cifres

Vocales:

  • Ramiro Martínez Costa
  • Manuel Nieto
  • José Pascual Fortea
  • Vicente Fullana Serra
  • María José Viñals
  • Joan Olmos
  • Carles Sanchis Ibor
  • Francesc Larroca
  • Salomé Moreno
  • Miguel Martín Monerris
  • Miguel Mondría
  • Tito Llopis